Niño y Patria aprueba nueva línea de trabajo en prevención con programa “Somos 10–14”
- La iniciativa marca un hito institucional al ampliar la misión de la fundación hacia el ámbito de la prevención, con foco en el desarrollo socioemocional de niños y niñas en adolescencia temprana.
En su última sesión, el directorio de Niño y Patria aprobó de forma unánime el inicio de su nuevo programa “Somos 10–14”, una propuesta preventiva que marca un hito institucional al expandir su quehacer más allá del ámbito de la protección especializada. A diferencia de los programas tradicionales de la fundación –dirigidos a niños, niñas y adolescentes que han sido vulnerados en sus derechos– esta nueva iniciativa no está destinada a atender situaciones de protección, sino a trabajar con población general, acompañando de forma temprana y significativa a niños y niñas entre 10 y 14 años, en una etapa clave para su desarrollo emocional y social.
La directora ejecutiva de la fundación, Erica Ponce, destacó la pertinencia de esta nueva línea de trabajo en el contexto país y el rigor técnico que sustenta su diseño. “Estamos frente a una oportunidad histórica. Hoy sabemos que muchas de las problemáticas que afectan a los adolescentes pueden abordarse antes, si llegamos a tiempo, en espacios seguros y con propuestas significativas. Este programa nace de nuestra convicción de que proteger es prevenir”, agregó.
“Somos 10–14” apunta a desarrollar habilidades como la autorregulación emocional, la empatía, la toma de decisiones y la expresión de emociones, en niños y niñas de entre 10 y 14 años. El diseño incluye un sistema de evaluación y seguimiento, así como la proyección de alianzas estratégicas con el mundo académico para su validación y mejora continua.
Durante la sesión, el presidente del directorio, Francisco Aylwin, valoró especialmente el enfoque preventivo y su aporte a la sostenibilidad institucional: “Este programa nos proyecta hacia el futuro, sin perder de vista nuestra misión histórica. Nos permite seguir protegiendo, pero también prevenir. Es una forma de ampliar nuestro impacto y responder a un desafío país con innovación y responsabilidad”.
Por su parte, la directora Verónica Monroy subrayó la importancia de enfocarse en un grupo etario históricamente invisibilizado: “La adolescencia temprana es una etapa crítica, pero muy descuidada en términos de oferta pública. Apostar por este grupo es estratégico y urgente. Hay mucha demanda por propuestas fuera del aula y esta llega con sentido, evidencia y un diagnóstico claro”.
El director Arturo Cerda también valoró el impulso renovador de la propuesta: “Hoy comenzamos a crear algo nuevo, pero desde la experiencia que ya tenemos. Esto va a mejorar el impacto de la fundación en todos sus frentes”.
Con esta aprobación, Niño y Patria inicia una nueva etapa, reforzando su legado de 60 años de trabajo con infancia vulnerada, pero ahora con una mirada que también busca llegar antes, acompañar mejor y prevenir desde el territorio y la comunidad.